Miesha Tate sufrió algunas lesiones en su derrota ante Ketlen Vieira en UFC Vegas 43, y una de ellas ya se curó.
Tate llegó a la distancia en una reñida pelea contra Vieira el sábado. La ex campeona de peso gallo trató de cerrar la distancia y marcar al contendiente clasificado No. 6 con varios derechos por encima de la cabeza, pero a menudo se encontraba con unos contragolpes que causaban bastante daño. Tate dejó el octágono con múltiples fracturas en la nariz y un corte debajo del ojo izquierdo que estaba casi hinchado al final de la noche. Tate necesitó algunos puntos para cerrar ese corte y los recibió un poco más tarde.
Solo cinco días después de la pelea, los puntos estaban listos para salir y "Cupcake" decidió no ir al médico por completo y hacer la extracción ella misma. Tate estaba equipada con un par de cortaúñas y una mano firme y tuvo la amabilidad de filmar (y compartir) el sencillo proceso para que todos lo veamos.
Por cierto, ¡no te recomendamos que pruebes esto en casa!
